miércoles, 31 de diciembre de 2008

Grupos nacionalistas vuelven a hacer de la 'Festa' un acto de repulsión a España

MANUEL AGUILERA
PALMA.- Los independentistas volvieron ayer a celebrar su particular Diada de Mallorca de rechazo hacia todo lo español. "A mí nadie me engaña, Mallorca no es España", no dejaron de corear. Por la tarde, celebraron una manifestación del Born a la Plaza de los Patines y pocos minutos después asistieron a la ofrenda floral al Rey Jaume I en la Plaza de España, en conmemoración a la conquista de Mallorca en 1229. Los gritos contra España y el 'expolio fiscal' al que aseguran tiene sometido el Gobierno central a Baleares protagonizaron la jornada.
A las 18 horas se saludaron en el Born las caras conocidas de siempre. Estaban todos: PSM, ERC, OCB, Joves per la Llengua, SEPC, Maulets, etc. Además de los dirigentes nacionalistas baleares, estaban el presidente de ERC, Joan Puigcercós, y el ex diputado del mismo partido, Joan Puig. No habían venido ellos solos de Barcelona. Según fuentes nacionalistas presentes en la manifestación, habían venido también viajes organizados de independentistas de Cataluña.
A las 18.30 horas comenzó la marcha con unas 600 personas. Avanzaba entre gritos contra España ante la mirada atónita de los que hacían sus compras y contemplaban con asombro. Al llegar a la Plaza del Mercat, un grupo de Maulets se paró ante dos policías nacionales y comenzó a gritarles "¡fuera las fuerzas de ocupación!" y "que se vayan" mientras dejaban junto a ellos tres maletas con carteles que decían: "Fuera del país".
Al pasar por las Ramblas alguien les tiró algo desde arriba de las escaleras de la Plaza Major y entre 30 y 40 independentistas subieron corriendo pero no pudieron atraparlo. Justo en la esquina de las estrechas calles Costa de la Pols y Arabí aprovecharon que no había policía para quemar una gran bandera española. EnSant Miquel, colgaron un cartel en la tienda Stradivarius «contra la talla 36» y forcejearon con el dependiente para que no la quitara. Poco después, bajando la calle Oms se oyeron a varios jóvenes gritar "¡viva España!" desde las azoteas. En ese momento, un grupo salió cadena en mano a por alguien en una travesía pero no ocurrió nada.

Después, en la ofrenda floral en la Plaza de España silbaron e insultaron a los miembros del PP y el Círculo Balear. Éstos últimos portaban una bandera española y otra mallorquina y tuvieron que ser escoltados por la policía hasta salir de la plaza.

Poco después, estalló la tensión en la calle Sant Miquel por el cacheo e identificación de un independentista menor de edad. Sus correligionarios se encararon y empujaron a la Policía Nacional. Finalmente, no fue detenido. Por otro lado, Ciutadans celebró un acto por la diversidad y las víctimas de la conquista de 1229.

lunes, 15 de diciembre de 2008

PSIB Y PSOE dos partidos distintos

La junta ejecutiva del PSC ha decidido votar a favor de los presupuestos generales del estado, una postura contraria a los acuerdos con las fuerzas nacionalistas, cuyo objetivo es la construcción de una nación ficticia. El PSC vota a favor de embajadas catalanas, apoyo a estatutos inconstitucionales y la manipulación de la historia en los colegios.

Sin embargo el PSC no es un hecho aislado en España, en Baleares PSIB ha demostrado ser un partido diferente al PSOE. Todos recordamos el eslogan del Gobierno Balear "cuatre illes, un país" o en castellano "cuatro islas un país". Otro ejemplo es la catalanización de las páginas oficiales con el ".cat" en un intento de romper con España. Sin olvidar la persecución del castellano en las escuelas de Baleares, y la negación del bilingüismo de nuestra comunidad.

Los ciudadanos tenemos que darnos cuenta del engaño. Si la corriente mayoritaria del PSIB es nacionalista, que busca una España con muchas naciones que lo diga claro. Yo le animo a ser coherente y valiente, y no piensan igual los socialistas en toda España, que se presenten como partidos distintos en España. O tal vez los coches oficiales y los despachos pesan más que los principios.

Luis Nadal

jueves, 11 de diciembre de 2008

Fraga comenta los primeros 30 años de Constitución

“La Constitución de España en sus primeros 30 años”, por Manuel Fraga
“La Constitución vigente en España presenta una serie de originalidades que vale la pena comentar. Es la única que fue elaborada por un Parlamento ordinario, sin especial encargo de elaborar una Constitución; por lo mismo, pasó por un Congreso de los Diputados y un Senado. A diferencia de lo ocurrido en la Europa posterior al Tratado de Versalles, en la que surgió un grupo de constitucionalistas dispuestos a apurar nuevas ideas de perfección constitucionalista, respecto de los Estados creados en el siglo XIX, fueron escasas las aportaciones que después de la 2ª Guerra Mundial se incluyeron en las nuevas Constituciones (Portugal, Grecia), debiendo en cambio subrayarse la influencia producida por la aplicación de varios textos dedicados a hacer listas de los Derechos Humanos, a nivel europeo o mundial. Con todo, desde una visión superficial la única novedad institucional, después de los trabajos de la Ponencia del Congreso, de la que me honré en formar parte, de la Comisión del Senado, de los Plenos de ambas cámaras y de la Comisión Mixta sería, en primer lugar, el Defensor del Pueblo.
Hay otra adición en este texto constitucional, respecto de los anteriores, que es la creación de autonomías regionales (con un carácter mucho más ambicioso que en la Constitución de 1931) y en torno al cual han surgido los temas más difíciles de la nueva era constitucional. No porque no estuvieran previstos por los redactores de la Constitución, que dieron al Gobierno (art.155) amplios poderes para restringir por los posibles abusos, pero lo cierto es que dicho artículo no ha sido aplicado ni una sola vez.La intención del constituyente fue correcta, pero es necesario aclarar una serie de cosas en materia de los idiomas: personalmente entiendo que todos los problemas posibles tendrían solución dentro de la propia Constitución, sin necesidad de reformas, pero exigen una clarificación política, en los programas electorales, en los sistemas educativos, en los debates parlamentarios, en las resoluciones judiciales (en particular, del Tribunal Constitucional) para asegurar la unidad y permanencia de uno de los Estados más antiguos y más consolidados de Europa, que además, disfruta de una lengua extendida por varios continentes y que figura entre las más nobles y prestigiosas del mundo, el castellano o español, la lengua de Cervantes.
Y todo ello en un momento en que por Europa entera se advierte la seriedad del problema, como lo confirman la desintegración de Yugoslavia, el problema planteado en el Reino Belga, y todos los demás que de modo u otro están creando conflictos, fracturas, genocidios monstruosos, y otras desgracias en nuestro mundo”.